Si deseas iniciar el proceso de perforación, lo recomendable es empezar con unos de tamaño pequeño y poco a poco ir agrandando.
En lo que se refiere a la higiene, lo aconsejable es que sea alterado por uno nuevo cada dos semanas, es por esta razón que vienen en bultos.
Si no se emplea el tamaño conveniente puedes ocasionar un desgarre en la piel y en el peor de los casos, una infección.
En la actualidad, las piercing y dilataciones en las orejas se han convertido en una de las mayores tendencias juveniles en lo que se refiere a perturbaciones anatómicos.
Existen diferentes formas de ellas, y hay que tener en cuenta que una forma adecuada puede asegurar un proceso de dilatación menos traumático.
El material que acostumbran a usarse es acero quirúrgico en el instante que se está comenzando a formar los agujeros, porque es mas seguro.
La mayoría suelen ser muy económicas y accesibles garantizando que a quienes les gusta este arte pueda temer mucha variedad en su colección personal.
Evita emplear piercing y dilataciones que empleen químicos colorantes cuando la herida este latente o reciente por el hecho de que podría generar infecciones en el lóbulo y complicarse.